Una vez más el tema del pelo ocupa “páginas” de nuestra revista. En esta ocasión, el tema se aborda a través de un documental grabado entre las dos orillas del Atlántico y en tres continentes. El tráiler, desde luego, promete.
E- ¿De qué trata vuestro documental?
TR.: Se trata de un producto cultural independiente que toca el tema del pelo afro a través de testimonios de mujeres y hombres en diferentes partes del mundo. El documental parte del pelo afro para hablar de la identidad en África y su diáspora.
- ¿Por qué ese título? Dado que habéis viajado, habréis oído de todo… ¿de qué otros modos despectivos denominan nuestro pelo?
TR.: Una buena parte de las personas que entrevistamos utilizaban el término “pelo duro” para definir al pelo afro. Nosotros, después de algunas conversaciones, decidimos convertir esa designación en un término positivo, es decir, DURO=FUERTE, una característica que nos une y que muestra nuestra resistencia física, espiritual e intelectual como personas afro. Tiene que ver con la forma en que se dicen las cosas.
En cuanto a denominaciones despectivas relacionadas con nuestro pelo afro, hemos encontrado términos como: Pasa, pelo malo, pelo duro, pelo bruto, pajón, cocotimba, etc, etc, algunos tiene su origen en la colonización y otros son más actuales.
- ¿Cuál se supone que es el pelo bueno?
TR.: Para nosotros no hay pelo bueno, ni pelo malo, se trata de diferentes tipos de pelo algo que están muy vinculado a la identidad de cada persona.
- ¿Por qué decidisteis grabarlo?
TR.: Ser miembro de una familia afrodescendiente en una sociedad como la cubana, es algo que te permite conocer de cerca los problemas a los que se enfrenta una mujer afro cuando quiere cuidar de su cabello. Por otra parte, trabajar en el cine de temática afro desde hace 25 años, te da la posibilidad de conocer cómo en muchos casos desde la diáspora idealizamos África como el continente madre, donde no hay ningún tipo de problemas con la identidad, pero cuando estás en África te das cuenta que hay grandes problemas en este sentido, y de uno de eso problemas hemos querido hablar en este documental.
Tanto Fátima Osia codirectora del documental como yo, pensamos que es un tema necesario porque nos atañe a todos, un tema que hay que abordar con respeto.
- ¿En qué países habéis grabado ?
TR.: Hemos grabado en Guinea Ecuatorial, Cuba, España, Uruguay y Estados Unidos.
- ¿Por qué decidisteis darle una dimensión global?
TR.: Pensamos que no es justo abordar un tema como éste sin escuchar lo que tienen que decir personas de diáspora que viven en otras realidades, con otras historias de vida. Se trata de tender un puente entre África y su diáspora, para hablar y reflexionar sobre un tema común.
- Hay quien dice que le concedemos demasiada importancia al tema del pelo…pero… Tras vuestras pesquisas, ¿diríais que identidad y cabello van de la mano?
TR.: Sin duda, el pelo es parte de nuestra identidad. Es nuestra herencia, y eso debe ser motivo de orgullo. Hay personas que por comodidad o por moda terminan “abrazando” patrones estéticos que no ayudan mucho a que se valore nuestro pelo y, aunque es una decisión personal, son posturas que, nos guste o no, existen y son tan respetables como cualquier otra.
¿Realmente tiene connotaciones que van más allá de lo meramente estético?
TR.: La mencionada frase “Mi pelo no me representa”, en mi opinión tiene matices. Si hay algo que históricamente hemos utilizado para decir quiénes somos es nuestro aspecto. En mucho casos ese aspecto da muchas pistas de quiénes somos, por eso, creo que nuestra estética está muy relacionada con nuestra identidad, con nuestra forma de pensar.
-¿Cuáles?
TR.: Somos seres sociales y formamos parte una sociedad, que a su vez está formada, en muchos casos, por personas de diferentes procedencias. Para conseguir respeto mutuo es importante que cada uno tenga conciencia de que, sin respeto, no hay una sociedad justa y eso es algo en lo que tenemos que pensar, cada persona debe ser aceptada por la sociedad tal y como es. Ser africano, cubano, chino o mexicano no debe ser motivo de vergüenza, en ningún caso.
- ¿Varía en función del lugar del mundo? Quiero decir, ¿africanos/as, afroamericanos/as y afroeuropeos/as vemos las cosas parecidas?
TR.: Según hemos podido ver, hay un denominador común: la discriminación hacia el pelo afro. Es decir, de una manera o de otra, el pelo afro no es un pelo con valor y, por otra parte, en cada lugar en dependencia de la influencia de la colonización o del alcance de los patrones de belleza, así se refleja en las historias de vida de cada persona.
- Por lo que he visto en el trailer, también tratáis el tema de la despigmentación con cremas… ¿Es algo que se esté dando con mucha asiduidad ? ¿Dónde ? ¿Qué aduce la gente que lo hace?
TR.: El tema de las cremas para la piel, es otro gran problema en muchas partes del mundo, principalmente en India y África, pero en el documental solo hay una pequeña referencia, en voz de una de las entrevistadas.
- ¿Qué es lo que más os ha sorprendido?
TR.: Para mí ha sido impresionante uno de los procesos que se utiliza para poner el pelo postizo, proceso que aparece en el documental y que es uno de los motivos de propagación de enfermedades como el SIDA, ya que en algunos casos estas prácticas se realizan en peluquerías que no tiene ningún tipo de garantías sanitarias.